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El
servicio
nace de un
corazón
que no
vive para
sí mismo.
¿Cómo
puede el
egoísta
servir?
¿Cómo
puede el
egoísta
dar lo
mejor de
sí?
El egoísmo
es el
fruto del
ego, el
ego
significa
el vivir
con un
corazón
dormido,
un corazón
lleno de
egoísmo;
el hombre
tiene que
despertar
primero
para que
pueda ser
de
verdadero
beneficio
para los
demás
seres.
¿Si tu
casa no
está en
orden,
cómo
puedes
pretender
ordenar
las casas
de los
demás?...
Esta ha
sido la
actitud
equivocada
de los que
han
querido
utilizar a
los demás
como
peldaños
en su
escalera.
Estos
hombres y
estas
mujeres
han
querido
ganarse el
cielo
haciendo
buenas
obras.
Esto es
solo un
negocio...
entre más
personas
creen
ayudar más
cerca
creen
estarán
del
cielo...
pero no es
así, el
hombre que
no se
conoce a
sí mismo
nunca
podrá
conocer la
verdad, la
verdad no
utiliza a
nadie para
alcanzar
sus metas,
la verdad
es el
fluir
natural
del amor
mismo.
Si en tu
corazón
existe el
verdadero
amor, no
hay
cuestión
de servir,
simplemente
porque
cada
acción
será un
servir en
sí misma.
El
verdadero
amor solo
existe en
aquellos
cuyo ego
ya no
existe...
Para el
hombre
despierto
el no
servir es
imposible.
El fluir
del amor
mismo es
tan
fuerte,
que su
vida se ha
convertido
en el
servir
mismo.
Limpia e
ilumina tu
corazón
totalmente....
a medida
en que
caminas en
busca de
la verdad,
comparte
con
aquellos
que están
a tu lado,
esto es lo
único que
puedes
hacer
mientras
estés
dormido.
El
universo
no te
reclamará
más de lo
que puedes
dar...
Siempre
recuerda:
el hombre
solo, no
es más que
una hoja a
la merced
del
viento,
todos
aquellos
que creen
ser la
fuente,
caen en la
prisión
del ego y
solo
aquellos
que están
vacíos de
ego pueden
ser un
vehículo
del
verdadero
servicio.
En la
antigüedad
el hombre
podía
alejarse
del mundo
y
descubrir
los
secretos
del
universo,
el hombre
actual
debe
de vivir
en el
mundo.
El
despertar,
el
eliminar
lo
indeseado
de tu
interior y
el
convertirse
en el
vehículo
para el
servicio,
es el
orden que
el hombre
sabio ha
puesto en
su vida.
Recuerda,
el
servicio
es la
virtud de
aquel que
ha ido más
allá del
ego…
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